Aprovecha la cuarentena replanteandote tu estilo de vida

Estos días en casa están dando para mucho. Entre todas las preguntas que nos planteáis, nos han llamado mucho la atención aquellas relacionadas con el sobrepeso y la obesidad.

¿Por dónde empezar?

Nuestros doctores aseguran que el primer paso para emprender un estilo de vida saludable es aprender a DETECTAR si tenemos sobrepeso u obesidad.

¿Por qué es tan importante?

No se trata de una cuestión estética, si no de proteger tu salud.

¿Sabías que el sobrepeso y la obesidad te ponen en riesgo?

Pueden desencadenar en el desarrollo de enfermedades, especialmente las cardiovasculares y renales, entre otras muchas. El IMC es la clave. Y en este post te ayudamos a calcularlo.

Según los últimos datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística el 36,6% de los españoles padecen sobrepeso y el 13,7% problemas de obesidad. Las previsiones no son mucho mejores y se estiman que los datos irán creciendo con el paso del tiempo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) tampoco ofrece mejores resultados ante esta situación y estima que aproximadamente en el 2030 la cuota de la población con problemas de exceso de peso será alrededor del 80%.

Estas tasas han hecho que España se encuentre por encima de la media europea de ciudadanos aquejados de obesidad y sobrepeso, afectando a 1 de cada 4 adultos y a 1 de cada 3 niños. Pero, ¿cómo hemos llegado ante esta situación?

Los malos hábitos diarios, el estrés y la falta de tiempo tras las altas jornadas de trabajo han provocado que nos convirtamos en una sociedad totalmente sedentaria y atrapada en el mundo de la comida rápida, procesada y llena de calorías vacías. En la mayoría de las ocasiones, los pacientes no son conscientes de los graves problemas que acarrea esta situación en el organismo y a veces ni siquiera son conscientes de que padecen este sobrepeso.

¿Cómo saber si tengo sobrepeso?

Hay muchas formas de conocer si padecemos o no sobrepeso y aunque la más fiable es calculando nuestro propio Índice de Masa Corporal (IMC), que más adelante contaremos, existen ciertas “pistas” que nos ofrece el organismo con las que ya podemos intuir que no estamos físicamente igual que antes.

Síntomas claros de qué hemos cogido peso.

¡¡Horror!! Los vaqueros del año pasado no solo no me abrochan si no que no soy capaz ni de subirlos ni a la cadera.

Pero, ¿Qué me pasa? Antes veía el autobús y con una pequeña carrera era capaz de cogerlo, vamos que no se me escapaba ni uno. Tras el verano no soy capaz ni dar 4 zancadas sin fatigarme.

¡¡No puede ser!! La clase de zumba era de mis preferidas y ahora ya ni me acuerdo de los pasos. Es verdad que el trabajo me tiene absorbida pero hasta tal punto de no ir, esto no puede seguir así.

¿Mi tupper? Es cierto que estos meses han sido duros pero ya no tengo tiempo ni para cocinar, tengo que dejar de comprar comida procesada en el super.

¿Te suenan de algo alguno de estos síntomas? Si tu respuesta es sí, tenemos que decirte que es muy probable que padezcas sobrepeso y que es hora de terminar de verificarlo calculando tu IMC.

Calcula tu IMC

Conocer nuestro Índice de Masa Corporal nos ayuda a saber cuál es el estado de salud de nuestro cuerpo y lo más importante cómo enfrentarnos a esta situación. Para calcularlo solo necesitamos saber la estatura y peso, ya que la relación que existen entre ambas nos determina el estado de salud general y el nivel de sobrepeso o incluso obesidad que podemos padecer.

Es una simple fórmula basada en tu peso (kg)/ altura (cm2). El dato que nos aparece es totalmente relevante, por ejemplo si el IMC se encuentra por encima de 25 ya nos está indicando que tenemos una situación de sobrepeso y que es hora de bajar esos cuántos kilos de más.

Los datos que se estipulan según el IMC son:

Menos de 18,5 está por debajo de lo normal y tienen un peso insuficiente.
Entre 18,5 y 24,9 peso normal y saludable.
Entre 25 y 29,9 nos encontramos en situación de sobrepeso.
Entre 30 y 39,99 estamos en situación de obesidad.
De 40 en adelante, indica obesidad tipo 3 conocida como obesidad mórbida o extrema.

Una vez hayamos conocido nuestro estado de salud es importante que sea un equipo de profesionales expertos en nutrición los encargados de realizar un estudio a nuestro cuerpo, comenzando así con técnicas para la pérdida de peso como las dietas personalizadas o tratamientos de reducción de estómago con o sin cirugía.

En nuestras manos está la solución ante este problema que afecta a toda la sociedad y tú, ¿comienzas con tu cambio de vida?