fbpx

8 consejos para prepararte para las comidas de Navidad

Dieta Navidad

Si hay algo que nos asuste más que no acertar con un regalo en Reyes, eso es no entrar en nuestro traje para la Nochevieja. Sin embargo, las comilonas de navidad son imperdonables y es que juntarse con la familia y darse un buen homenaje, es el sello distintivo de estas fechas.

¿Cómo podemos compaginar nuestro deseo de estar ideales con nuestro compromiso con los deliciosos guisos de tu abuela? ¡No te preocupes! Por fortuna, las comidas navideñas aunque copiosas son pocas y para sobrellevarlas hay una serie de tips que te van a permitir compaginar lo saludable con los atracones -y además prometemos que no son consejos demasiados duros de seguir-.

¡Sigue sonriendo después de haberte dado un auténtico festín de asados, langostinos y otras delicias propias de estas fechas! -¡ay, bendito roscón!- porque si sigues estas pautas, una navidad a dieta es posible.

1. Compensa tus comidas

¡Equilibra tus alimentos! De nada sirve arrepentirte de cada bocado que le das al alimento estrella de la cena de Nochevieja y no disfrutarlo como se merece. Sabemos de sobra cuáles van a ser las comidas copiosas durante estos días, así que trata de alternarlas con una buena dosis de alimentos saludables.

Si vas a hacer una comida pesada, compénsala con una cena ligera y viceversa. Es imposible esquivar los manjares poco healthy durante estas fechas pero de este modo, conseguirás contrarrestar sus efectos en tu dieta. ¡Ojo! No cojas este consejo como una norma ya que una vez pasadas estas fechas, lo recomendable es que vuelvas a tu dieta saludable habitual.

2. Mantén tu metabolismo activo

Si eres un adicto al picoteo entre horas y no precisamente al saludable, despídete de ello durante estas semanas. Mantén tu metabolismo activo ingiriendo alimentos cada 4 horas, pero hazlo de forma healthy.

Sustituye las galletas de media mañana por una pieza de fruta e incluye en tu merienda zumos naturales a base de frutas de temporada, de tal forma que no incurras en digestiones pesadas en las fechas más señaladas de la navidad.

¡No te olvides de la fruta en Navidad!

Por otro lado en las comidas principales el día detente a saborear los alimentos. Come despacio, mastica bien y olvida el ansia para favorecer a que la sensación de saciedad aparezca antes consiguiendo de este modo ingerir una menor cantidad de alimentos.

3. Aumenta el consumo de alimentos diuréticos

En muchas ocasiones la sensación de pesadez no tiene tanto que ver con la cantidad de grasa si no con el de líquidos que nuestro cuerpo acumula. Los alimentos diuréticos permiten drenar tu organismo y además son muy sencillos de incluir en una dieta equilibrada.

Retomando el punto anterior de mantener tu metabolismo activo, incluye entre esas frutas que vas a ingerir la piña y la pera, dos de los alimentos más beneficiosos para evitar la retención de líquidos. Por otro lado, alimentos como el pollo, el pavo y el pescado al horno también son ideales para tal fin.

¡Y por supuesto! Que no se te olvide el agua. Recuerda que un adulto debería consumir unos 2 litros de agua al día – unos ocho vasos, para que te hagas una idea- para favorecer el correcto funcionamiento del organismo.

4. Reduce la ingesta de hidratos

¡Mucho ojo! No te estamos diciendo que elimines por completo el pan, la pasta y el arroz de tu dieta, pero sí que moderes su consumo. Tenemos que tener en cuenta que la energía que nos aporta este tipo de nutriente es esencial para que funcionemos correctamente en nuestro día a día, pero el abuso de consumo puede derivar en problemas como ganancias excesivas de peso.

Con cambios tan simples como cambiar el pan blanco por otro tipo de panes -como el de espelta o avena- o sustituir en nuestra cocina la harina de trigo por alternativas a base de coco o frutos secos puedes conseguir ajustar tu dieta para llegar mucho más holgado a los atracones navideños.

5. Prevé tu surtido de dulces

A todos nos priva un buen polvorón, los mazapanes y por supuesto el típico roscón con o sin relleno sin embargo, lo que suele ocurren es que los restos de turrón que no hemos podido comer durante las fiestas se acumulan durante el resto de año suponiendo una fuerte tentación que nos llama desde nuestra despensa y que nos llama a pecar con la excusa de quitárnoslos del medio.

Controla la compra compulsiva de dulces navideños.

Viendo los dulces que se han comido en tu casa en años anteriores, calcula el surtido exacto que necesitarás para estas navidades porque, en este caso, ¡es mejor quedarse corto  que pasarse!

6. ¡Cuidado con los aperitivos!

Junto a los dulces, los aperitivos son las grandes trampas de las comidas navideñas. La hora del aperitivo pre comida es, sin darnos cuenta, el periodo de tiempo en el que más comemos ya que normalmente son bocados muy pequeños y “fáciles de comer”. Ten controlados los aperitivos y tendrás controlada una gran parte de tu dieta navideña.

Sustituye los saladitos y el embutido pesado por otras alternativas como por ejemplo encurtidos o cócteles o canapés a base de frutas o pescados ligeros como el salmón ahumado.

7. No comas menos, come mejor

De nada sirve restringir por completo ciertos alimentos o comer menos cantidad con el fin de llegar mejor a las comilonas navideñas. De hecho si has tomado esta decisión ¡enmiéndala ahora mismo! Porque llegarás a la mesa engalanada de decoración con un ansia inmenso y eso hará que comas mucho más y sobre todo mucho peor, ya que sobre ella tendrás todos esos alimentos que has estado intentando apartar durante semanas.

Evita los atracones no privándote de alimentos las semanas previas a la Navidad.

Como ya te hemos dicho, es necesario que mantengas activo tu metabolismo. No tienes por qué apartar la pizza de tu vida por completo.

8. Ponte a tope con el deporte

Busca un deporte que se adapte a ti, a las necesidades de tu organismo y al tiempo que tienes libre para practicarlo. No te obligues a ir al gimnasio si realmente no disfrutas realizando esta actividad; quizá lo tuyo sea la natación, salir a correr o alguna que otra clase de baile.

Encuentra una actividad física que te motive y utiliza la excusa de ponerte a punto para la navidad para comenzar a realizarla. ¡Engánchate a ella! Y haz que la constancia haga todo lo demás.

Las calles de nuestras ciudades ya están listas para la Navidad, ¿lo está tu cuerpo también? Si sigues este consejo, podrás disfrutar de unas fiestas saludables sin renunciar a guisos preparados con mimo y con más contundencia que los que te preparas durante el resto del año. Navidad ¡nuestro organismo está preparado para ti!

 

¿Deseas valorarte con nosotros a distancia?
Te lo ponemos fácil en solo 3 pasos:
Empezar Valoración Online