El verano ya está pidiendo pista, ya vemos los primeros rayos del sol, las terrazas desempolvan sus mesas y sillas preparándose para la temporada, los maniquís nos enseñan piernas, brazos y ombligos, y nosotros comenzamos esa pequeña metamorfosis, abandonando hasta dentro de unos meses el caparazón invernal.
Aunque es la época del año donde nos encontramos más felices también es justo el momento que tanto evitamos durante el resto del año, ese en el que nos enfrentamos a nuestra propia realidad: nuestra imagen corporal. Año tras año mayo no solo nos trae la apertura del verano, sino miles de preguntas que nuestro “yo-interno” se repite una y otra vez: ¿podré ponerme el vestido del año pasado?, ¿me quedará bien el bikini este verano?, ¿cómo puedo deshacerme de una vez el michelín que los reyes me dejaron?
Todas estas preguntas tienen una respuesta clara, comenzar la operación bikini ya. La preocupación por la imagen corporal es tal que durante los próximos meses, antes de la entrada en vigor del verano, se produce un aumento de hasta un 30% en las operaciones de cirugía estética. Y es que, aunque pueda parecer que todavía está muy lejano el pisar la playa o las vacaciones, en menos de dos meses ya estarán nuestros pies tocando la arena del mar. Aún así, no se trata de una cuestión de meses, sino una cuestión de plazos que garanticen las buenas praxis del sector, como nos explica el presidente de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética. El fin es ayudar a que la persona pueda compatibilizar sus cuidados, tras la operación, con las actividades más comunes del período estival.
Y aunque sepamos que cada persona tiene unas necesidades y problemas distintos, verano tras verano, vuelve a repetirse la demanda de tratamientos de cirugía estética como la liposucción, aumento de pecho o rinoplastia.
Las cirugías estéticas corporales que más se demandan
Sí, es posible eliminar la grasa acumulada
Si hay algo que estéticamente nos preocupa por encima de todo es nuestra figura. Una de las mejores (o peores) cosas del verano es estar todo el día luciendo pierna, brazo o abdomen, y claro es obvio que nadie quiera que esos kilos asomen la cabeza.
Eliminar la grasa acumulada es algo muy habitual en esta época del año y para ello el tratamiento de liposucción nos ofrece la mejor solución a este problema. En ocasiones, hay cúmulos de grasa concentrados en diversas zonas de nuestro cuerpo como pueden ser las caderas, glúteos o piernas, que por mucha dieta o ejercicio que realicemos es imposible eliminarlos, sin embargo la liposucción nos permite no solo deshacernos de ellos, sino también modelar nuestro cuerpo.
En este tipo de intervenciones es importante que el paciente conozca que el postoperatorio se basa principalmente en llevar, aproximadamente un mes, una faja. El objetivo es ayudar a reducir lo antes posible la hinchazón de la zona que se ha intervenido.
“Solemos sugerir que este tipo de cirugías se realicen cuando aún no haga mucho calor. Además es recomendable, que durante el mes previo a la liposucción, los pacientes no tomen el sol, ni que lo hagan en los meses posteriores, ya que la piel se puede ver afectada y pigmentarse” según nos cuenta el vicepresidente de la SECPRE.
Tras el tratamiento, nuestros especialistas aconsejan la realización de masajes de drenaje linfáticos, que nos permitan reducir la cantidad de agua que se suele retener tras la inflamación, así como el inicio de un programa específico de alimentación saludable y actividad física que nos ayude, aún más, a perder ese volumen.
Adiós al complejo de nuestro pecho
Con más de 15.000 intervenciones al año en nuestro país, el aumento de pecho ha conseguido convertirse en la reina de la cirugía estética. Cada vez son más el número de mujeres que se sienten acomplejadas con sus senos, provocando un rechazo a su estética, sobre todo, en esta estación.
La mamoplastia de aumento es uno de los tratamientos que más demanda tiene en períodos vacacionales, ya que ayuda a la mujer ha recuperarse más relajadamente. Las principales ventajas que tiene esta cirugía es la rápida intervención, en menos de dos horas y media, y el período breve de postoperatorio, ya que en unas tres semanas la paciente será capaz de volver a realizar una vida totalmente normal y activa. Durante los primeros 7-10 días se debe evitar el levantamiento de peso, movimientos bruscos con los brazos o cualquier maniobra que provoque la supuración de las cicatrices o incluso pueda ocasionar golpe alguno en el pecho.
Los expertos aconsejan que el sol no incida en el pecho durante, al menos, unos tres meses para poder prevenir infecciones y cicatrices, podremos ir a la playa pero teniendo cuidado. Como bien indica la SECPRE es “Importante considerar el tipo de prótesis mamaria, para asegurar una correcta planificación de la intervención. En el caso de colocarse por debajo del músculo la recuperación será más lenta que si se realiza por encima, por lo tanto el plazo de postoperatorio será mayor”.
Ganan fuerza las cirugías estéticas faciales
Tan importante es sentirse bien con el cuerpo como con el rostro. Las operaciones de estética facial también se ven incrementadas durante esta época del año, las rinoplastias o cirugías de la nariz son una de las más demandadas entre la población española junto a la otoplastia.
Aunque el período de recuperación no es excesivamente largo, si es importante conocer las pautas que tenemos que seguir en el postoperatorio, por ejemplo es fundamental que protejamos de la exposición solar aquella zona que ha sido tratada, en el caso de las cicatrices siempre tienen una peor respuesta cuando soportan altas temperaturas. Otra de las recomendaciones que nos suelen dar los distintos expertos en tratamientos para el rostro es evitar los lugares donde se produzcan aglomeraciones de gente, con el fin de evitar cualquier golpe o traumatismo que pueda dañarnos.
La sorpresa de este año nos la llevamos con el tratamiento de lifting facial, parece que la búsqueda de un rostro tenso y sin imperfecciones ya no es misión imposible. El rostro es una de las zonas más vascularizadas del cuerpo, por lo que es más probable que puedan aparecer hematomas tras una intervención, de ahí que los médicos extremen más la precaución de evitar la exposición solar si vamos a realizarnos este tipo de cirugías.
Independientemente del tipo de tratamiento por el que decidamos optar es importante conocer los plazos de recuperación, las acciones que previamente tenemos que llevar a cabo (análisis de sangre, exploración cardiológica, historial del paciente…) todo con el fin de preservar la realización de un buen tratamiento y su posterior recuperación.