Con o sin cirugía, para un tipo concreto de sobrepeso, específico para aquellas personas en situaciones de obesidad mórbida…existen tantas técnicas y métodos a nuestro alcance, para combatir cualquier tipo de enfermedad relacionada con el peso, que es normal que no sepamos de primera mano cuál se adaptaría mejor a nuestras necesidades o cuál nos puede ayudar más a poner fin al sobrepeso y la obesidad.

De entre todos los tratamientos que existen el Balón Gástrico se ha convertido en uno de los más demandados entre aquellas personas que padecen sobrepeso o una situación de obesidad tipo 1. La rapidez, seguridad y efectividad con la que actúa ha hecho que más de 100.000 pacientes consigan perder ya unos 18 kilos durante los primeros 6 meses y se olviden de sus problemas relacionados con el aumento de peso. Pero, ¿es el Balón Gástrico el mejor aliado para combatir el sobrepeso? ¿Son válidas cualquiera de las dos técnicas que existen? ¿Es una solución definitiva?

Quién mejor que nuestros especialistas para poder resolver todas estas dudas, por ello, nos hemos reunido con nuestros médicos del área de obesidad, sobrepeso y nutrición para que sean ellos mismos quiénes nos ofrezcan una respuesta rotunda a las miles de preguntas que soléis hacernos.

Balón Gástrico, el gran aliado contra el sobrepeso

El Balón Gástrico o intragástrico es un método endoscópico que se utiliza para poner fin a los problemas de peso y conseguir una reeducación de los hábitos de vida del paciente. Su principal ventaja frente a otro tipo de técnicas es la necesidad de no tener que recurrir a la cirugía para reducir el estómago, algo que ha provocado que sea uno de los tratamientos más demandados entre los pacientes de sobrepeso y obesidad tipo 1.

¿En qué consiste realmente el balón intragástrico?

La colocación del balón dentro del estómago se lleva a cabo mediante endoscopia. Se introduce desinflamado y se rellena con suero fisiológico, ocupando parte del estómago y actuando de manera inmediata en la disminución de la sensación de hambre y mejorando la saciedad.

Puede permanecer dentro del organismo entre 6 y 12 meses dependiendo de las necesidades de cada paciente y del peso que tenga que perder. Durante este tiempo, el paciente podrá llevar una vida totalmente cotidiana, ya que no ocasiona ningún tipo de molestia una vez que el organismo se haya adaptado a ello, contribuyendo así a la mejora de la salud del paciente desde el primer minuto.

El papel del nutricionista junto al esfuerzo del paciente se vuelven fundamentales para el éxito de este método. La sensación de saciedad provoca una menor ingesta de cantidad de comida, que se traduce en la modificación de las conductas alimenticias desde el principio, como la cantidad de alimentos y la realización de una actividad física constante. Complementar el tratamiento con una dieta basada en la reestructuación alimenticia es fundamental, no solo para conseguir bajar de peso si no ayudar al paciente a conocer que tiene y que no que comer.

Aunque es cierto que cualquier persona que padezca obesidad y sobrepeso puede someterse al balón gástrico, no todas son capaces de conseguir el resultado esperado con esta técnica. Es importante que el equipo médico haga un estudio personalizado previo para saber en que situación se encuentra y si es recomendable está técnica.

Balón Gástrico ¿De 6 meses o de 12 meses?

Si estáis replantearos comenzar con este tratamiento seguro que os habréis hecho esta pregunta, ¿Qué será mejor de 6 o de 12 meses? Ambos son igual de válidos y eficientes, la principal diferencia es la cantidad de tiempo que se encuentre el balón ubicado en el estómago.

Elegir uno u otro va a depender del número de kilos que el paciente necesite perder para volver a su estado de peso normal. En situaciones con un grado 2 de sobrepeso lo más común es que se indique el de 6 meses, ya que la cantidad de volumen que hay que perder es mínima a comparación de otros métodos. En el caso de encontrarnos una obesidad de tipo 1 e incluso 2 lo normal será un balón gástrico de 12 meses, la duración será mayor no solo por el número de kilos que debe de perder sino por la necesidad de reeducar al paciente sobre los importantes hábitos de alimentación.

Beneficios de ambos métodos

Con el paso de los años el Balón Gástrico ha conseguido alcanzar la cima de los tratamientos contra el sobrepeso y la obesidad y eso es gracias a sus beneficios:

Se podrá llegar a perder hasta 37 kg durante los 12 meses, tiempo máximo que puede encontrarse ubicado en el estómago.
Reducción de estómago sin cirugía.
En menos de 15 minutos podrás comenzar con el cambio hacia una vida saludable.
No necesita ningún tipo de hospitalización.
Es rápido, eficaz y poco invasivo.
Al acompañarlo de un programa de reeducación nutricional, el paciente no padecerá ningún efecto rebote.